martes, 28 de septiembre de 2010

Reconciliarse con uno mismo...hoy es un buen día para empezar.

"Reconciliarse con uno mismo es un acto que solo tiene
valor cuando se toma absoluta conciencia de lo que
significa"

La semana pasada, para ser precisa, el sábado, me encontraba en una plaza comercial esperando hacer tiempo en lo que iniciaba una película, entonces fui a la sección de revistas y me encontré con una, que al hojearla, su contenido se me hizo sumamente interesante. Uno de los artículos que se me hizo de gran interés lleva por titulo "Aceptarnos como somos", el cual a continuación comparto un pequeño fragmento con todos ustedes.

Actualmente, el trabajo de la psicoterapia es, sobre todo, un entrenamiento de nuevas habilidades y el aprendizaje de puntos de vista más saludables. Entre ellos, el de mirarse con los mejores ojos, reconciliarse con uno mismo y ser benevolente con las propias limitaciones o con la particular manera de ser en el mundo. Una persona extrovertida es, por ejemplo, alguien abierto, sociable, conversador y que se siente cómodo rodeado de mucha gente. Un introvertido, es alguien más bien introspectivo, reflexivo y que habitualmente lo pasa muy bien a solas consigo mismo. Ninguna de esas dos conductas es patológica por sí misma, pero ambas son fuentes de dolor o sufrimiento cuando la persona  en cuestión cree que debería (o le convendría) ser de la otra forma.

Una de las primeras tareas de una buena terapia es enseñar al paciente a confiar en su propia capacidad de creer hacia mejores lugares, aunque dejando claro que el camino no es el enfado ni la autoexigencia. (B. Jorge, Mente Santa, número 57, pp 3-4).


Es cierto, que para poder acceptar a los demás, primero debemos aceptarnos a nosotros mismos tal como somos, para poder querer y amar, debemos querernos y amarnos primero a nosotros mismos. Seguramente, en muchas ocasiones nos hemos puesto frente al espejo y vemos un reflejo que no nos gusta, que no nos hace del tanto felíz y ¿qué es lo que hacemos? nos criticamos para mal, que estoy gorda, no me gusta mi cabello, debería ser mas alto etc... siempre nos estamos buscando el lado negativo. Ahora yo te pregunto ¿qué es lo que mas te gusta de ti? tus ojos, tu forma de reír, tus manos...algo en ti debe de gustarte y quizá no te has percatado que te gusta porque no le has dado el tiempo suficiente para criticarlo, date un tiempo de verte al espejo y busca algo que de ti guste, te haga sentir bien y si puedes has una lista de todo lo bueno que hay en ti y critícalo para bien.

No es necesario viajar al lugar mas recóndito del mundo y silencioso para encontrarnos a nosotros mismos, simplemente hace falta que nosotros estemos dispuestos a dar ese cambio, quizá mejor decidamos quedarnos donde estamos, porque el miedo al cambio es aterrador, sin embargo si no te atreves  a dar ese primer paso hoy, posiblemente mañana ya sea demasiado tarde.

Limpia tu corazón a conciencia, perdona, y perdónate a ti mismo, deja ir esos recuerdos que no te dejan vivir tu presente, no te aferres a algo o a alguien que no es para ti, debemos aprender a soltar el pasado, se que no es una tarea fácil, pero una vez hayas tomado la desición HAZLO, ATREVETE!... una vez que lo hayas hecho, te sentirás muy bien, y de ese modo estarás dándole un nuevo sentido a tu vida, estarás empezando una nueva vida, disfrutando tu presente.

Fotografía de Yolotzín Solis.